Archivo | Eureka RSS feed for this section

De cabeceras II

11 Oct

Post vago para comepensar el hecho de que ayer no escribí: más cabeceras. Esta vez no las he elegido por su calidad, sino porque tienen cierto valor personal para mí por las anécdotas que hay detrás de ellas, que más bien se resumen en hacer el gilipollas con mi novia Tati (¡un beso que se que me lees!) cuando vemos la serie juntos y salen en pantalla.

The Big Bang Theory

The History of Everyting, de los Barenaked Ladies, es el tema que suena mientras un breve resumen de la historia de la humanidad nos lleva hasta los protas de la serie. La verdad es que es una canción que se da bastante bien para bailar.

Hustle

Tiri, tiri, tiri, tiri, tiri… Los créditos de Hustle son muy sencillos pero efectivos, y cumplen a la perfección el objetivo de explicar la serie en 45 segundos… y además son geniales para intentar hacer cosquillas con cada tiri. Estos son la segunda versión, por cierto.

Sugar Rush

¡Es todo rosa!, me decía ella. Y la canción de Blondie, One Way or Another, da para mover la cabeza a diestra y siniestra casi como si estuvieras escuchando Ace of Spades de Mötorhead, por ejemplo.

Eureka

Esta es la primera versión, que en los últimos capítulos ya aparece recortada, lo que es una pena. Eso sí, la música, calmada y pausada, llama a dar golpes ligeros con los dedos en la pierna de la persona que está a tu lado.

Parenthood

Para éste tenéis que ir a youtube, ya que ninguno de los que hay permite inserción. Esta cabecera no tiene mucho más que la propia canción de Bob Dylan, Forever Young. Es la versión rápida de las dos que hizo. Y en la versión que se vendió a otros países creo que la cambiaron por otro tema, supongo que por cosas de derechos.

The Cleveland Show

Perdonad por la calidad, pero no hay un vídeo mejor en youtube. La verdad es que la canción, así con los toques a lo tema disco de los 70, está chula, y la voz de Cleveland en ella se presta a imitarla y cantar a la vez que él.


Viajando en el tiempo de un pueblo fantástico

12 Sep

Eureka ha tomado en esta recién medio acabada cuarta temporada una par de decisiones bastante arriesgadas. Por un lado, han hecho temblar los cimientos o directamente derrumbado todas las relaciones personales y de poder entre personajes que había hasta el momento. Y por el otro, se han metido en el terreno de los viajes en el tiempo, algo que si no haces bien puede tirar por tierra la calidad de la serie. Esas decisiones han sido acertadas y han conseguido darle un nuevo aire a un show que ya empezaba a estancarse demasiado en el caso de la semana.

El viaje a 1947 de principio de temporada ha hecho que Carter y compañía se enfrenten a una nueva situación en su vuelta a casa, y ha permitido meter en la historia a un James Callis que se sale con éxito del papel de transtornado que había hecho en Battlestar Galactica y al final de FlashForward.

Tenemos a Carter y a Allison que por fin establecen una relación sentimental después de cuatro años de una tensión sexual no resuelta tan obvia que todos sabíamos que iba a acabar en la cama más tarde o más temprano, aunque ello supusiera dejara por el medio a una Tess que no iba a niguna parte y que tal como llegó se fue. Henry aparece casado en lo que es la línea argumental más floja de la temporada, Jo (que deja de trabajar para Carter) y Zane ya no están juntos y Fargo pues casi como siempre, pero siendo jefe de Global Dynamics. Y hablando de personajes, pues decir que no he echado nada de menos a Zoe, y los capítulos en los que estuvo pareció más una molestia que otra cosa.

Mientras todas estas situaciones se desarrollaban hacia lo que parece un remake calcado a como estaba antes del viaje en el tiempo, es decir, todo es lo igual pero no es lo mismo, seguíamos teniendo el caso de la semana, pero esta vez en muchos capítulos estaba directamente relacionados con lo que estaban viviendo los personajes y permitía y ayudaba a su desarollo personal, en vez de simplemente estar porque sí. El capítulo en los que todos se tienen que enfrentar a sus demonios personales personificados en alucinaciones es el máximo exponente de esto.

Por cierto, esta fue la temporada en la que pasó algo que ya se veía venir, el crossover con Warehouse 13 que nos confirma que las dos series pertenecen al mismo universo narrativo. Que Fargo y Claudia hayan sido los protagonistas quizá no es lo que quisieramos a priori, que era ver a Carter en el Warehouse y a Pete y Myka en Eureka, pero quizá era el más lógico. Son dos personajes con un perfil muy parecido, incluso diría que son el mismo personaje cambiado de sexo, y la verdad es que no hacían mal equipo. Seguro que no es el último crossover que veremos.

Resumiendo, ha sido una temporada bastante sólida. Espero que en la segunda parte, que me imagino que será en enero, siga en la misma línea.