Archivo | United States of Tara RSS feed for this section

El reboot de los Gregson

3 Abr

Si no fuera porque he visto las dos temporadas anteriores, al ver el capítulo con el que empieza esta tercera tanda de United States of Tara hubiera dicho que es una serie nueva que acaba de debutar el lunes pasado.

Realmente al ver este primer episodio de la temporada he tenido la sensación de que se trataba más de un piloto que de una serie que tiene dos años en sus espaldas. Desde la falta de ese opening tan bueno que tiene (aunque habiendo alters nuevos tiene sentido que lo hayan eliminado), la elección de Comic Sans como fuente para parte del título de la serie al principio del capítulo, la manera en la que se abrieron las nuevas tramas, la sustitución de su identidad visual tan característica por una más genérica… casi todos los elementos de esta entrega gritaban episodio piloto a pleno pulmón.

Y sin embargo, viendo el contenido del capítulo, todo encaja. Al fin y al cabo, todos los personajes, cada uno a su manera, están iniciando una nueva etapa en sus vidas bastante diferentes a lo visto hasta ahora, a pesar de que el pasado intenta que no lo consigan. Tenemos a Tara, que habiendo aceptado que nunca se va a librar de sus alters decide retomar su carrera universitaria sólo para encontrarse con un profesor de esos tan típicos, gilipollas y más que subido a la parra. Además, la preocupación de Max por lo que le puede causar el estrés universitario a Tara y la razón por la que ésta lo dejó la primera vez está creando ciertas tensiones, incluyendo lo que parece la aparición de una nueva y misteriosa personalidad alternativa, tan malvada y autodestructiva que el resto de los compañeros tienen que enfrentarse a ella antes de dar su apoyo a la Tara original.

Quizá la vuelta a la universidad del personaje de la Collette aporte un nuevo punto de vista sobre la enfermedad que sufre. Si en las dos temporadas pasadas se nos ha dado una visión sobre las consecuencias del DID en los ámbitos emocional, familiar y laboral, este año parece que vamos a verlo desde un prisma académico, aprovechando la polémica existente entre los profesionales del campo sobre la existencia real o no de esa enfermedad.

Para el resto de los personajes, también tenemos nuevos comienzos. Charmaine tiene que enfrentarse a las consecuencias de su embarazo y de la cancelación de su boda con Neil a su lado y formando una pareja que no es pareja, y con Kate, que se ha mudado a la casa de su tía y vuelve a buscar un trabajo normal después de la ida de olla de la Princesa Valhalla, que es precisamente lo que le impide encontrarlo. Y Marshall, pues empieza un nuevo nivel en su relación con Lionel, el del un compromiso más serio que el típico beso ocasional.

Y para terminar, la que para mí es la parte más floja de la serie: esa excavación arqueológica en el pasado de Tara y la búsqueda de las raíces de su enfermedad. Cuando este arco argumental aparece en el capítulo, suele cortar completamente el ritmo de la historia y mi interés en lo que se está viendo cae en picado. Menos mal que aunque Buck y Charmaine tienen interés en buscar al hermanastro ese, Tara pasa mil de él, lo que me imagino que hará que al principio tengamos menos raciones de esta trama, aunque estoy seguro de que a lo largo de la temporada nos veremos cada vez más implicados en ella.

En resumen, a pesar del shock inicial en cuanto al nuevo aspecto de la serie, no ha sido un mal debut de temporada y por lo que leo por ahí a gente como Sepinwall la cosa sólo va in crescendo, así que habrá que estar preparados para un año movidito. Y lo que me gusta que sea así.